Empezar a probar un auto que no encaja completamente en un segmento es un tanto complicado ya que al querer compararlo con tal o cual auto genera una confusión acerca de ello. Exactamente eso nos pasó con la Subaru Outback de esta prueba de manejo, un automóvil que bien puede parecer una vagoneta con capacidades de SUV o bien, una SUV no tan alta con apariencia de vagoneta. Aquí nuestras impresiones.
Exterior discreto
Estéticamente la Subaru Outback no es aquel auto que la gente voltea a ver por su atractivo diseño, su apariencia es más bien discreta y bien lograda, sin exageraciones y sin líneas que denoten un diseño de esos que llamen la atención. La carrocería es larga, muy al estilo de las vagonetas pero al mirarla detenidamente nos percatamos de que su altura con respecto al piso es casi igual al de una SUV y que cuenta con unos plásticos protectores en toda su parte baja, por aquello de cuidar la lámina al momento de entrar por caminos difíciles que puedan dañar la pintura. Con este detalle y el anagrama Symmetrical AWD colocado en la parte trasera, la Outback nos advierte que su manejo puede ser tan divertido como eficaz, ya sea en carretera como en caminos de mediana dificultad.
Intuitivo y completo interior
Al abrir la puerta y revisar minuciosamente el interior, encontramos una atmósfera muy placentera donde el espacio para 5 personas es muy amplio con todo y una gran cajuela, los materiales, tanto plásticos como pieles, se notan y se sienten de muy buena calidad, un poco por arriba de lo que podremos encontrar en productos similares de otras marcas japonesas y americanas. La mayoría de los controles y botones se encuentran exactamente en la posición que deberían estarlo haciendo muy intuitivo su uso por lo que no cuesta trabajo adaptarse tanto a los controles del aire acondicionado ni a los botones del infoentretenimiento y de la computadora de viaje colocados en el volante.
Otro detalle del interior es que la pantalla central cuenta con mucha información del sistema de audio como de algunos aspectos mecánicos del automóvil como el reparto de fuerza de las llantas así como algunos datos del consumo de combustible y forma de manejo; lo malo es que, contrario a la simplicidad de todo lo demás, encontrar y manipular de forma eficiente todas sus funciones a través de sus controles digitales nos llevará más de cinco minutos.
A rodar, dentro y fuera del asfalto
Tal y como lo prevenían sus detalles exteriores, la Subaru Outback es tan eficaz en el asfalto como divertida y capaz fuera de él. Hablando de su motor, este es un bóxer de seis cilindros y 3.6 litros, muy característico de la marca con el cual se tiene un centro de gravedad más bajo debido a la posición de algunos componentes del motor. La potencia de 256 HP es entregada a través de una caja CVT que pudiera pensarse que es una automática convencional dado que no presenta esa «anestesia» con la que muchas de estas cajas se caracterizan.
Comprobamos en carreteras y autopistas que el motor de 3.6 litros es suficiente para lograr buenos ritmos de 120 – 140 km/hr y que a pesar de su elevada altura con respecto al piso, no presenta tanto balanceo como pudiera esperarse al hacer cambios de dirección la cual es muy precisa y se lleva de maravilla con el sistema de tracción total en las cuatro llantas que aumenta el grado de confiabilidad al rodar por caminos con muchas curvas.
Fuera de los caminos asfaltados la Subaru Outback cumple gracias al ya mencionado sistema de AWD. Pasear con ella por terracerías y sortear uno que otro tramo un tanto enlodado o encharcado será pan comido. Donde las cosas no son tan eficientes, dado que no es un 4X4, es en pendientes muy pronunciadas y en pasos difíciles, lo primero ya que aunque su altura es alta, no es la suficiente para practicar off road, y lo segundo ya que las llantas que monta de fábrica no están orientadas a un trato extremo.
Conclusión
Estamos plenamente seguros que la Subaru Outback no necesita estar en uno u otro segmento para ser lo que realmente es: una camioneta con capacidades de SUV y con la practicidad de una vagoneta; una combinación que toma las mejores cualidades de ambos tipos de vehículos y los agrupa en un divertido auto que sin ninguna duda te podrá llevar y traer por autopistas y carreteras como cualquier otro pero también lo hará, y de forma muy eficaz, en terracerías cuando la diversión y la aventura de un fin de semana sean prioritarias.
No es lo más interesante en cuanto a diseño pero el equipamiento, materiales y confiabilidad de una marca que en Estados Unidos y otros países cuenta con gran reputación hacen que sea una opción interesante de compra que se puede usar en distintos ambientes y saldrá bien librada de todos ellos.
Precios y versiones en México
La versión que ocupa esta nota fue la más equipada disponible en México con el motor 3.6 litros, sonido harman/kardon y paquete de navegación con un precio de $592,900. Además de ella, estas son las otras versiones disponibles en México, las dos más accesibles con un motor 4 cilindros de 2.5 litros y 175 HP.
- Subaru Outback 2.5i: $432,900
- Subaru Outback 2.5 i Premium: $451,900
- Subaru Outback 3.6 R Premium: $526,900
- Subaru Outback 3.6 R Limited: $544,900
- Subaru Outback 3.6 R Limited harman/kardon: $580,900
- Subaru Outback 3.6 R Limited harman kardon + navegador: $592,900
Salvador Sánchez Díaz
Twitter: @Chava_SD
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